viernes, 21 de enero de 2011

Los hombres libres no tienen bolsillos.

Subía y bajaba la ciudadela buscando un poco de veneno. En las calles había un operativo federal que ya había arrojado como resultado la captura de un narcomenudista. Todos tenían miedo pero no dejaban de vender, facilmente conseguí ml pesos de fiesta química hard core. ¿Por qué ese autodestructivo sentimiento? Podía percibir como la fachada de mi humanidad se despedazaba igual que las casas frente a mí. Apestaban las alcantarillas del callejón que trecientas veces he atravesado en madrugada: el silencio. Y no es que todo fuera obscuro en esos días, bien podía recordar todo el tiempo que sería peor haber muerto ya completamente. ¿Habría que celebrar entonces? Las miserias que en las manos del vagabundo se depositan son cheques sin fondo; abismos interminables que alimentan la catarata de vicios en esta tierra de gusanos panteoneros. Los hombres libres no tienen bolsillos.

lunes, 3 de enero de 2011

Vallan todos, con elegancia, a mamárme la verga

Si sos de aquellos que atesoran la vida
Si sos de aquellos que temen a la muerte


Tiempo fuera
Time out

Somos el begin de un mundo aparte

¿Podés recordar simplemente?

Cobardía

Desinteresía

Tiempo amargo

Mirá…

Tres puntos.

Mirá…

¿Qúe te gusta}}}}}}}}}}
¿Lo aparente?
¿O las mentiras?
Teclear es sencillo
Si ay ácidos de por ½
Somos unos bastardos enormes que engrandecen la psicodelia
Por, para, pará
Erecciones, en oferta
Vaginas calientitas que se multiplican
Hay que meterse… dice el macho
Hay que apretar
Dice la hembra
Y la vida espeta… sintetizadores al por mayor expriman como máquinas el jugo…
Triples vidas al horno
Dos tres veces traviesas no bastan
Si se quiere llegar a Tepa…
O más preciso
A las piernas entreabiertas que una mujer delgada presume,

Amigos
No sigan esta música
No bailen estos versos que escribe la historia
Describan probables encuentros
Y vayan a mil
Siempre.

Somos lo único
Pero hay que juegar
La transgresión estética

Como gallo
Como plataforma que estremece
Escucho una palabra que determina el ritmo de mis discursos.
Se llama…

( Aten a sus mentes la locura en cintas si quieren saber que pasa debajo de la suela de sus abollados zapatos…)

El sin fin es lo último que buscarán los equinos desvelados.

Podría poner junto a tus senos un aroma hermoso.
Pero no.
Predico simple matemática.

Libertad.

Fuera de ella. Imaginen tú y tu macho.
El mundo todo revuelto.
¿Qué hemos hecho de él?
Lo
Po
Sible
PDBASTARDA. Que mueran todos los que dentro de las letras encuentren el sentido de la vida. Que vivan todos los que, gestando problemas,  se ganen la eternidad…